La Casa Musoles fue creada en el año 955, poco menos de un siglo
después de la conquista de las Baleares, a medida que la población en
las mismas iba creciendo. Y fueron creciendo en torno al puerto
fortificado de Mallorca, a donde pronto fue transportada gran parte de
la flota militar de la Casa Cruilles, y se convirtió en un puesto clave
para la defensa marítima del Ducado.
Sin embargo, a
medida que la importancia demográfica y económica de las islas crecía,
también lo hacía su resentimiento hacia su Ducado, que consideraban
lejano y poco interesado en sus asuntos. Aunque numerosos barcos
Cruilles pasaban por sus puertos, pocos permanecían, y las islas
necesitaban muchas cosas aún del exterior para prosperar y crecer. Así
que cogieron algunos de los barcos militares que tenían, les quitaron la
bandera, y los dedicaron a la piratería en el Mar Mediterráneo.
Por
supuesto, esto causó problemas con Francia y las ciudades italianas,
pero las amplias arcas Cruilles siempre los cubrían. Pero permanecían
distantes, lo cual aumentaba los deseos de independencia de los Musoles,
pero no tenían ocasión para cumplirlos. La Casa Cruillé se encontraba
creciendo imparable, y su potencial económico simplemente era demasiado
para ellos.
Hasta que llegaron las guerras con la
Casa Alba, y la intervención de la Corona Medinaceli. Tras perder el
Condado de Teruel, el Ducado Cruillés estaba más débil que nunca antes, y
los Musoles sabían que o tomaban la ocasión o nunca lo harían. Así que
trajeron de vuelta todos sus barcos militares y construyeron más en
secreto, para poder finalmente declarar roto su vasallaje hacia sus
señores.
La flota Cruilles zarpó apresuradamente de
sus costas, pensando que la familia Condal no tendría una flota adecuada
para detenerla. Pero el resultado fue bien diferente, y la flota
Musoles les derrotó con dificultad pero contundencia frente a la costa
de las islas. Con la mayor parte de su flota militar dañada o hundida,
los señores tuvieron que retirarse, y el Rey pronto intervino para
aceptar la independencia de la Casa Musoles en un intento de evitar que
el conflicto se prolongase.
Ahora los Musoles han
vuelto a su tarea habitual de piratería, pero saben que la flota
Cruillés ha crecido mucho con los años, y que sus cofres ya no cubren
los problemas que ahora puedan tener con otros reinos. Así que los
Musoles son cada vez más conscientes de su necesidad de aliados.
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